10.10.06

La pena de muerte

Hoy es el día mundial contra la pena de muerte, y pena precisamente es lo que me dan los que la defienden y puritito asco los que la practican. ¿Por qué pena? pues porque en realidad son marionetas malinformadas durante cientos de años, y es difícil cambiar una realidad así. Los que la defienden afirman que es la única forma de acabar con el crimen y los criminales, algo a lo que ya no sé cómo contestar, porque parece que no les sirve como argumento lo de que en los países que la practican no dejan de practicarla, algo que desmorona esta teoría si lo piensas bien (aunque creo que lo de pensar no va con ellos). Como no sirve este razonamiento, vamos entonces por el argumento del error:
En agosto de 2006, se indultó a Lena Baker, de Georgia, ejecutada en 1945 por el asesinato de su jefe. Dado que había actuado en defensa propia, podía haber sido acusada de homicidio no premeditado, delito menos grave que conlleva una condena media de 15 años (indultar 61 años después de asesinarla a una persona hace, por supuesto, que sus restos descansen mucho más en paz)
En 2004 se ejecutó a Cameron Willingham, de Texas, condenado por la muerte de sus tres hijos en un incendio ocurrido en su casa en 1992 a pesar de los testimonios de expertos en incendios provocados, según los cuales el incendio fue accidental. (Debe ser que los expertos no tenían demasiado crédito, porque si no, no me lo explico)
Esto, por supuesto, si hablamos de los USA, que aún reconocen sus errores. Si nos vamos a China con 3.400 ejecutados (reconocidos, que hay quien dice que pueden llegar a 10.000), o a Irán o a Vientnam, los 4 países que ostentan el récord de ejecuciones en el mundo, seguramente nos encontraríamos más aberraciones a los derechos humanos de las que podríamos soportar.

Mi pregunta es: ¿quién tiene el poder de decidir sobre la vida de otro? los defensores a ultranza de la pena capital contestarán inmediatamente que tampoco los asesinos la tienen, y yo estaré de acuerdo, pero entonces lo único que demostramos es que los que tenemos de nuestro lado la justicia, y supuestamente la razón, somos tan cabestros (y perdón a los cabestros por la comparación, pero no encuentro otra más acertada) como ellos.
Otra de las famosas justificaciones pro-asesinato legal es la de que mantener a delincuentes peligrosos en las cárceles supone un gasto inútil para la sociedad, algo también fácilmente rebatible (¡Oh! ¡El dinero! ¡Cuántos argumentos es capaz de dar y cuántos de ellos sin sentido!) Contra esto, yo afirmo que las cárceles no deberían ser nunca aparcamientos, sino lugares donde el fin sea la reinsercion (por eso tampoco creo en las cadenas perpetuas) y donde además se puede conseguir que los internos "paguen" a la sociedad sus culpas mediante trabajos dirigidos. ¿Cuál es el problema? pues que para esto básicamente hay que pensar, hacer trabajar un músculo que tienen tan, tan atrofiado en países como Irán, Vietnam, China y los todopoderosos United States of America, que es prácticamente imposible que lo hagan sin tener una contractura o similar en el mismo.
Me encantaría que este texto en concreto suscitara algún tipo de discusión (aunque me temo que los pocos que entráis por aquí pensáis más o menos como yo) porque creo que el tema es sumamente grave, aunque no tengo demasiadas esperanzas en que esto cambie. Por un lado, países como China, Vietnam e Irán no se caracterizan por su respeto a los derechos humanos, así, en general, y no creo que nos hagan demasiado caso a quienes pretendemos cambiar su forma de ver las cosas, especialmente porque desde nuestra comodidad diaria es difícil que se nos escuche. Por otro lado, el gran gigante contradictorio acaba de aprobar una ley que permite la tortura, y al mismo tiempo se declara paladín y defensor de la democracia en el mundo, algo que deberían tratar psiquiatras, a ser posible con medicación (y mucha) y no simples personitas de a pie como nosotros.
Por si acaso alguien quiere hacer algo más que escribir unas palabritas, aquí os dejo el enlace del informe de Amnistía Internacional, y os animo a que, si no os viene mal, colaboréis de alguna forma con alguna de las campañas que llevan a cabo. Poco más puedo hacer por ahora, pero si me entero de algo, os mantendré informados:
http://www.es.amnesty.org/temas/pena-de-muerte/





1 comentario:

Anónimo dijo...

decía Gandalf algo como...

"Hay gente que merece morir y vive, y hay gente que muere que merecería vivir. Si no puedes devolver la vida, no te apresures a quitarla"

un beso, rose